Ser mamá en pandemia - FEMSA
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Ser mamá en pandemia

FEMSA

Por: Pamela Torres, Coordinadora de Comunicación Digital de FEMSA Servicios.

 

Tenía 6 meses de embarazo y para mi sorpresa, un trabajo nuevo. Nunca pensé que me contratarían en una empresa a tan pocos meses de comenzar mi incapacidad por maternidad, pero confiaba en mi talento y mis ganas de seguir creciendo y desarrollarme dentro de la compañía, afortunadamente, FEMSA también confió en mí.

 

Al mismo tiempo, a mi esposo se le presentaba una nueva oportunidad laboral y nos estábamos mudando de casa, lo cual implicaba también un cambio de escuela para nuestra hija Romina de 6 años. Corría el mes de abril del 2020, en ese momento no lo sabíamos, pero a todos estos cambios, tendríamos que sumarle uno más: vivir una pandemia.

 

Yo venía de trabajar por tres años en Coca-Cola FEMSA, una empresa del grupo, a donde ingresé como Analista de Comunicación Externa y la verdad, nunca había experimentado el trabajo a distancia ya que la mayoría de mis actividades las desarrollaba en las plantas de manufactura o centros de distribución.

 

Desde el día uno que ingresé a FEMSA estuve de home office, todo ha sido remoto, desde mi inducción hasta decir que no conozco personalmente a varios de mis compañeros; no he tenido la oportunidad de convivir presencialmente con ninguno de ellos, ni he salido al OXXO a comprar un café a media mañana, pero independiente a este esquema virtual, podría decir que con algunos de mis compañeros he logrado formar una bonita amistad.

 

Y no sólo eso, el apoyo de mis jefes ha sido fundamental para poder desarrollarme ante este nuevo reto de mi carrera; al medir mi desempeño a través de mis resultados, me dan la libertad de organizar mi tiempo como mejor me funcione, lo cual, ha impactado positivamente mi calidad de vida y la de mi familia durante esta pandemia.

 

No obstante, a esta modalidad a distancia, a mí siempre me ha gustado aprender y ser autodidacta, y en FEMSA he tenido la oportunidad de hacer una agenda de desarrollo, tomando cursos que ofrecen en línea, los cuales me han permitido especializarme en mis nuevas funciones, gracias a ellos, mi curva de aprendizaje fue en ascenso y nunca se estancó a pesar de mi ausencia por la maternidad.

 

Una de las cosas que me encanta de FEMSA, es que puedo acercarme a cualquiera de mis compañeros o a mi jefe cuando necesito asesoría o apoyo en algún tema, o para aclarar dudas sobre el funcionamiento de la empresa y la manera de operar de cada una de las Unidades de Negocio, y recibir a cambio su tiempo, paciencia y una buena actitud; eso ha sido el mejor ejemplo de vivir esa #CulturaFEMSA de la que tanto había escuchado.

 

Y vaya que lo he necesitado, porque si de por sí ser mamá es todo un reto, ser mamá trabajadora, y durante una pandemia, te puede llevar a la locura.

 

Atender juntas, resolver pendientes, cumplir con fechas de entregables y proyectos, ser autodidacta, mantener tu casa limpia y cumplir tu rol de esposa y madre, al mismo tiempo que tratas de que una niña de seis años asimile la nueva modalidad de las clases en línea, que haga sus tareas, tratar de explicarle qué significa estar en una pandemia, y por qué no puede ir a la escuela de forma presencial o salir a jugar con sus amigos al jardín, puede llegar a ser bastante complicado para la dinámica familiar y al final es muy agotador.

 

Y en medio de todo este caos, nace mi pequeña pandemial: Emilia, quien vino a agregarle un reto más a nuestra familia dentro del encierro.

 

Durante toda mi vida he enfrentado diferentes retos, pero mis ganas de superarme siempre han sido más que cualquier dificultad. Me gradué de Ingeniería Mecánica Industrial -no en la universidad que yo quería, más bien, en la que pude pagar- y para ello, tuve que buscar becas y financiamientos y desde muy chica trabajé para lograr graduarme. Nada me detuvo.

 

Fui mamá joven, que siempre buscó tiempo para todo: mi hija, escuela, amigos y trabajo. Porque si de algo estoy convencida es de que nosotros nos ponemos nuestros propios límites; para todo hay tiempo si te organizas lo suficiente y sabes bien lo que quieres. Como mamá, siempre vas a buscar la manera de que tus hijos estén bien y que estén felices, cueste lo que cueste.

 

Mis papás inculcaron en mi hermano y en mí, el valor del trabajo. Mi mamá, educadora de profesión, nunca nos descuidó por ser una mamá trabajadora, al contrario; verla entregada a su profesión, siendo esposa, madre y además encontrando siempre la manera de tener tiempo para ella, fue sin duda una gran inspiración.

 

Eso quiero para mis hijas, que siempre busquen superarse, que aspiren a ser grandes líderes, que puedan encontrar siempre la manera de abrir puertas cuando la vida intente cerrarlas, y que vean en mi una motivación para trabajar por sus sueños, sus metas y realizarse como personas.

 

No siempre es fácil. Hay momentos -sobre todo en este último año-, en los que desempeñar tantos roles y querer que todo el mundo esté feliz, llega a ser bastante abrumador. Sé que no soy la única que tiene días en los que no te quieres levantar, ni hacer la comida, ni pensar en cómo explicarle a mi hija por milésima vez por qué no puede ir a la escuela… y está bien. Pero es justo en esos momentos en los que hay que voltear a nuestro alrededor, valorar y agradecer por todo lo que tenemos.

 

Valorar que tenemos trabajo, que estamos sanos y juntos, sentirnos orgullosas de todo el esfuerzo que hacemos día a día como mamás por nuestros hijos y nuestra familia.

 

Yo estoy agradecida con FEMSA por adoptarme, y digo adoptar porque siento que llegué a una gran familia, que cuando tengo que salir corriendo al doctor porque alguien se enfermó, o cuando me ven en junta con mi hija llorando en brazos, hacen una pausa para recordarme que están ahí para mi sin importar la situación que esté pasando en casa.

 

Agradecida por mi esposo con quien he formado un gran equipo desde el día uno y con quien puedo terminar un día difícil viendo una serie, mientras mis hijas duermen sanas y felices, me hace sentir que después de un día tan pesado, todo ha valido la pena.

 

Tomemos un día a la vez, porque esta pandemia pasará, pero seremos mamás toda la vida.

 

Pamela Torres Rojo, Coordinadora de Comunicación Digital de FEMSA Servicios