Por: Laura María Chocoza Aguilar, Coordinadora de Centro de Reclutamiento OXXO Pacífico Norte, y Tutora en Instituto OXXO.
Soy tutora del Instituto OXXO y me fascinan las historias de superación y de vida que surgen de ahí. Cuando comencé, hace ya 12 años, me motivaba la idea de impartir lecciones para ayudar a los demás, sin saber que aquellas que me darían mis alumnos serían todavía más valiosas e inspiradoras.
Una de mis favoritas es la historia de Elias, un exalumno mío, hoy gran amigo, y graduado de nuestra primera generación como Licenciado en Gestión de Negocios Comerciales; él comenzó en OXXO como encargado de turno, al poco tiempo pasó a cuadrilla, después como auditor de inventarios, entrenador, asesor y otras posiciones más en la operación, hasta ocupar la de coordinador de recursos humanos, y posteriormente jefe del área. Además de su éxito profesional, él continúa estudiando, recientemente terminó su maestría y no dudo que pronto vaya a formar parte del equipo de tutores de Instituto OXXO. ¿Qué mejor testimonio para el alumnado que ver casos como él?
Y así como él, está Mary, una colaboradora que empezó trabajando en tienda, y hoy es reclutadora en mi equipo; también Claudia y Wendy, que iniciaron en tienda, actualmente son entrenadoras y no dudo que pronto las vea como asesores de tienda, o Perla, quien primero fue encargada, luego líder de tienda, auditora y hoy tengo la fortuna de tenerla como mi compañera; siendo asesora de tienda.
Y es que mi mayor orgullo, tanto a nivel personal como a nivel tutora, es poder ser parte de todo esto. Tener la oportunidad de contribuir a que una persona pueda cambiar su vida. Cuando identifico a alguien con potencial y ganas de crecer, no me detengo hasta lograr que se convenzan de todo lo que pueden lograr.
Soy originaria de Mexicali, Baja California. Crecí en una familia muy unida siendo la segunda de tres hermanas, ambas grandes profesionistas a quienes admiro mucho. Así nos educaron mis papás, de ellos aprendimos la pasión por el trabajo y el ser muy independientes. Nos enseñaron la importancia de estudiar, viajar y aprender, pero lo más importante, nos dieron la confianza para desarrollarnos en lo que nosotros eligiéramos y crear nuestra propia historia. Y así lo hicimos.
Llegué a OXXO hace 17 años. Soy Contador Público de profesión, comencé en la compañía como auxiliar contable, pero en el camino me enamoré de Recursos Humanos y todo lo que implica, así que continué preparándome, hice mi especialidad en finanzas, después mi maestría y, entre más aprendo, más me convenzo de que el conocimiento es la herramienta más poderosa que existe.
Con eso en mente, en el 2012 me apunto como tutora en el Instituto OXXO.
A través del Instituto OXXO, la compañía brinda becas del 100% a colaboradores que deseen cursen una carrera profesional, y que por falta de recursos no habían podido hacerlo. La duración es de tres años y la modalidad es totalmente en línea, lo cual permite tener alumnos de todas partes de la república mexicana.
El 40% de los tutores de Instituto OXXO somos colaboradores internos de FEMSA; yo he impartido varias materias, desde fundamentos de contabilidad, introducción a la administración, hasta ética, presupuestos, macroeconomía y microeconomía; me gusta compartir el conocimiento, pero también aprender, porque todo esto me ayuda a mantenerme vigente.
Al momento, son 475 el número de graduados del Instituto, muchos de ellos ya dentro de las filas administrativas de OXXO. La empresa se toma muy en serio el compromiso de desarrollar a su gente, porque reconoce que tiene la manera de darles oportunidades, de seguirlos desarrollando, de verlos brillar y, con eso, ganamos todos.
Además del crecimiento profesional, el común denominador que he visto en mis alumnos es la realización personal.
Para muchos de ellos, graduarse de una carrera profesional es saldar una deuda que tenían con ellos mismos, ya que por circunstancias de la vida o ciertas decisiones no les permitieron continuar con sus estudios. Son personas que se lo deben, que te dicen “yo lo quiero hacer por mí, por mis hijos… se lo prometí a mis papás, a mis abuelos, ¡yo puedo!”.
Es increíble ver que el Instituto OXXO es un parteaguas en la vida de la gente; ya que les ayuda a nuestros alumnos a desarrollarse y tener una visión mucho más amplia, porque eso es lo que te da el conocimiento.
Siempre he pensado que es como si te quitaran una venda de los ojos, y te das cuenta de que hay mucho más allá de la historia que pensabas que ya estaba escrita para ti.
Dicen que para ser maestra se necesita vocación, y yo descubrí la mía la primera vez que tuve gente a mi cargo, y la primera vez que estuve frente a un grupo de alumnos; en esos momentos me prometí que sería un líder de gente y una maestra de esas que recuerdas con mucho cariño porque te hizo crecer, te ayudó a sacar lo mejor de ti, te enseñó algo que jamás olvidaste.
Estoy convencida de que, si la vida me sigue rodeando de personas que me necesitan, es para dejarlas mejor que como las conocí.
Y eso es lo que me ha regalado FEMSA y el Instituto OXXO al darme la oportunidad de ser tutora: la trascendencia. Porque creo firmemente que la única manera de trascender es a través de los demás.
Si una persona llega lejos y yo fui parte de esa historia, ¡mi tarea está cumplida!
