Por: Rolando Vázquez Carrillo, Director de Operaciones OXXO GAS.
Recuerdo aquel jueves como si fuera ayer. Era un 28 de agosto en la ciudad de Monterrey, México. Me levanté y me preparé para ir a trabajar, sabiendo que ese no iba a ser un día común en la estación. Mi equipo y yo nos reunimos en una esquina de la Avenida Nogalar y Los Ángeles, para alistar los últimos preparativos de un evento que, sin saberlo todavía, cambiaría la industria de la venta de combustible en nuestro país: la inauguración de la primera estación de gasolina, construida, administrada y operada por OXXO en México.
En aquel tiempo, mi deber era liderar al equipo de 25 personas que estarían a cargo de dicha unidad, compuesta por una estación de gasolina y una tienda OXXO; juntos, trabajábamos por cuidar hasta el mínimo detalle para recibir a nuestros primeros clientes.
El entonces Presidente del Consejo de FEMSA y uno de los más grandes líderes que ha tenido México, Don Eugenio Garza Lagüera, fue de los primeros en llegar.
Muy atento, revisaba cada detalle y saludaba a todos con esa calidad humana que lo caracterizaba; aún recuerdo su emoción cuando me pidió que probáramos la terminal bancaria para cobros con tarjeta. En aquella época, era poco común que una gasolinera aceptara esta forma de pago, por lo cual, nuestro convenio con Bancomer para implementarlo representaba un gran hito.
Don Eugenio me entregó su tarjeta y le cobré un peso… aún lamento no haber conservado el ticket de esa transacción que significó tanto para mi y para toda la industria.
Mi historia en FEMSA comienza 10 años antes de ese momento.
Yo inicie en el área de desarrollo de Sistemas de OXXO a mediados de los ochenta.
En aquella época, los procesos en almacenes y en las tiendas eran muy manuales, en donde las computadoras como las conocemos hoy apenas surgían, y mientras tanto, se seguía cobrando en cajas registradoras.
En ese momento, José Antonio Fernández era el Director General de OXXO, y recuerdo que impulsaba mucho la implementación de las nuevas tecnologías para agilizar las operaciones. Fue entonces que me asignaron el proyecto de desarrollar y computarizar la operación, primero de almacenes y después de tiendas. Al estar en contacto con la parte operativa del negocio, descubrí lo mucho que la disfrutaba y me apasionaba.
Por ello, cuando OXXO decide entrar a la industria de combustibles, no dudé en pedir una oportunidad dentro de la operación. Y fue así como hace 25 años, fui testigo del inicio de OXXO Express, empresa de combustibles que luego se convertiría en la más grande del país y que hoy conocemos con el nombre de OXXO GAS.
Cuando iniciamos, en México había alrededor de 4,000 gasolineras, muy pocas en comparación de las más de 13,000 que existen hoy.
Era tan poca la oferta y tan alta la demanda, que ninguna se preocupaba por brindar un buen servicio, ni de cuidar que se entregaran los litros completos a los clientes. Las opciones eran tan limitadas, que no había un porqué hacerlo.
Recordemos que antes de la reforma energética, nuestros logos, colores y uniformes, estaba regulado: todos vendíamos gasolina Pemex, al mismo precio y con la misma imagen, por lo cual, era un reto muy difícil diferenciarnos y lograr que el cliente nos identificara como un grupo diferente.
Siempre supimos que, si queríamos lograrlo, teníamos que ser una empresa que se destacara por su honestidad, por su excelente servicio, que cuidara muy bien a su gente, y que navegara con los valores que caracterizan y respaldan a FEMSA.
¿Por qué cuidar a nuestra gente?, simplemente porque ellos son la empresa. Ellos son quienes brindan el servicio, y si ellos están orgullosos y felices con su trabajo, esto se transmite y se traduce en una buena actitud y un servicio de calidad a cada uno de los cientos de miles de clientes que acuden a nuestras estaciones día a día.
Fue así como empezamos a capacitarlos, a escuchar sus necesidades y brindarles las atenciones y prestaciones que en otras gasolineras no había. Gracias a ello, hoy tenemos más de 7000 colaboradores comprometidos y muy diversos, desde madres y padres de familia, jóvenes que buscan hacer carrera en la empresa, hasta adultos mayores, estos últimos, siendo un gran ejemplo de responsabilidad y experiencia para las nuevas generaciones.
En este 25 aniversario, celebro mucho más que el crecimiento, permanencia y éxito de la empresa; celebro algo más que mis logros personales, haber conocido a mi esposa dentro de sus filas, o las veces que mis hijos, cuando estaban pequeños, me señalaban orgullosos una estación OXXO GAS con largas filas de clientes que nos preferían sobre otras gasolineras.
Celebro algo más que haber encontrado un nuevo rumbo profesional, pasar de desarrollar sistemas en una oficina a operar y administrar un negocio, y todos los estudios y experiencias que eso requirió.
Hoy, celebro a la gente de OXXO GAS. Porque OXXO GAS somos su gente.
Celebro a todos los que formaron parte de la evolución de OXXO GAS, y a aquellos que actualmente hacen posible la operación de nuestras 563 estaciones.
Celebro a aquellos compañeros que iniciaron despachando gasolina, y que con apoyo de la empresa lograron crecer y desarrollarse hasta ser los grandes líderes, jefes y gerentes que son hoy.
Celebro haber coincidido en este viaje con personas talentosas e innovadoras de las que he aprendido y sigo aprendiendo tanto.
Celebro los litros completos, que no sólo han generado confianza en nuestros clientes, sino la admiración de nuestras familias y la satisfacción propia del deber cumplido.
Celebro cada kilómetro que hemos recorrido juntos.
Y seguiremos juntos.
¡Vamos juntos!
